De los sabrosos razonamientos que pasaron entre
Don Quijote y Sancho Panza, su escudero, con otros
sucesos y donde aprendemos que no hay diferencia
alguna entre un loco tonto y un tonto.
Das von dem köstlichen Zwiegespräch handelt,
das Don Quijote mit Sancho Panza, seinem Knappen
führte, mit anderen Ereignissen und wo wir lernen,
dass es keinen Unterschied gibt zwischen einem
dummen Verrückten und einem Dummkopf.
Sí, sí, sí, tú eres un chico muy listo, muy graciosa
te parece la historia. ¡No, qué va, tu no tienes nada
de Sancho Panza ni de Don Quijote! Pero una cosa
tendrás que explicarme. Si esta historia se hizo tan
famosa, tiene que haber algo muy verdadero en ella
¿no te parece? No has oído decir miles de veces
„¡¡menuda quijotada acabas de hacer!!“, „vaya, éste
sí que es un Sancho Panza“ „pero hacer eso, sería
como luchar contra molinos de viento“.
Ja, ja, ja, du bist ein ganz schlauer Junge, so lustig
findest du diese Geschichte. Ach was, du hast gar
nichts von einem Sancho Panza an dir und von einem
Don Quijote auch nicht. Wenn diese Geschichte so
berühmt ist, dann muss etwas sehr Wahres an ihr
sein, glaubst du nicht? Hast du nicht schon Tausend
Mal gehört „was für eine Quijoterie hast du da veranstaltet“, „also wirklich, dieser ist schon ein Sancho
Panza“, „also dagegen anzugehen, das ist wie gegen
Windmühlen kämpfen“.
Siempre se les achaca estos comportamientos quijotescos a los otros. Claro, tú eres la excepción, nada
de locura, muy cuerdo ¿no verdad? Tú, no tienes ninguna Dulcinea del Toboso como la patria, por ejemplo, en la que piensas mucho pero ella nunca en ti;
o como la santa fe cristiana, cuyas promesas son
tan irreales como las islas con las que sueña Sancho
Panza ¿ a que no?
Solche quijotesken Verhaltensweisen zeigen immer die anderen. Klar, du bist die Ausnahme, kein
bisschen verrückt, sehr vernünftig, stimmt‘s? Du hast
keine Dulcinea del Toboso, wie etwa das Vaterland
zum Beispiel, an die du jeden Tag denkst, wohingegen sie nie an dich. Oder wie der heilige christliche
Glauben, dessen Versprechen so irreal sind, wie die
Inseln, von denen Sancho Panza träumt. Stimmt‘s?
Si lo piensas bien, tú también sabes que no es para
nada verosímil, que crucificasen a alguien, mitad Dios
y mitad hombre, porque hacía seis mil años una mujer
comió una manzana, ¿o me equivoco? Y si tantas cosas haces para honrar a ese alguien, que murió para
purgarte del pecado original que cometieron vuestros
primeros padres al comer la manzana, ¡¡perdóname!!
Pero es que has de estar bastante desesperado.
Wenn du es dir überlegst, dann weißt du schon,
dass es nicht besonders wahrscheinlich ist, dass man
jemanden, der halb Gott halb Mensch ist, steinigt,
weil sechstausend Jahre vorher eine Frau einen Apfel
gegessen hat. Oder irre ich mich? Und wenn du zu
Ehren dessen, der starb, um dich von der Erbsünde
zu erlösen, die darin besteht, dass deine allerersten
Ahnen einen Apfel aßen, soviel tust, dann, entschuldige, musst du schon ziemlich verzweifelt sein.
Te comprendo mi hijito, no hay por qué avergonzarse. ¿No hubo caudillos en España que lo eran por
la gracia de Dios y tú creías en ellos? ¡Madre mía,
cuántas cosas te prometían y cuán dulces los sentimientos que te invadían cuando salías a dar la vida
por algo tan impreciso y ambiguo! Con qué facilidad,
con sólo un „viva la muerte“, sustituías tu vacío interior por una locura, incluso a sabiendas de que era
una locura, pues todo lo soportas mejor que el vacío.
Te diré aun más, no me interesa mucho ese futuro
del que me habla el sabelotodo futurista que cada a cada rato, se entromete en esta historia mas te diré,
que incluso dentro de cuatrocientos años y por todas
las partes de la Tierra, surgirán gran cantidad de Dulcineas del Toboso.
Ich verstehe dich, mein Sohn, du musst dich nicht
schämen. Gab es keine Anführer von Gottes Gnaden
in Spanien und du hast an sie geglaubt? Mein Gott,
was haben sie dir alles versprochen und wie süß die
Gefühle, die dich durchströmten, als du dich aufmachtest, um dein Leben für so unklare und zweideutige Dinge hinzugeben. Mit welcher Leichtigkeit, mit
nur einem „Hoch lebe der Tod“, hast du deine innere
Leere gegen eine Verrücktheit ausgetauscht, obwohl
du wusstest, dass es eine Verrücktheit ist, denn alles
ist erträglicher, als die Leere. Ich sage dir noch was.
Die Zukunft, von der der futuristische Besserwisser,
der sich dauernd in das Gespräch einmischt, interessiert mich nicht, ich sage dir jedoch, dass noch in
vierhundert Jahren, in allen Teilen der Welt, ein große
Anzahl an Dulcineas del Toboso entstehen werden.
Búrlate, de todo aquello en lo que crees desesperada y fervientemente. Como muestra nuestro sabelotodo del futuro, esta historia se leerá también en los
tiempos venideros, porque es una historia verdadera,
más verdadera que la pura verdad.
Mach dich lustig über all das, woran du verzweifelt und inbrünstig glaubst. Wie unser Besserwisser
aus der Zukunft beweist, wird man diese Geschichte
auch in kommenden Zeiten lesen, weil es eine wahre
Geschichte ist, wahrer noch als die reine Wahrheit.
Muy gracioso el diálogo entre Don Quijote y Sancho
Panza.
Sehr witzig, dieser Dialog zwischen Don Quijote
und Sancho Panza.
Ya que esta nueva hazaña lo había liberado de su
penitencia, quiso saber lo que la sin par Dulcinea del
Toboso había dicho al recibir noticias de su caballero andante. Como Sancho Panza había llegado nada
más que hasta la taberna, tuvo que responder con
mentiras, aunque tales mentiras resultaban al final
más verdaderas que la verdad misma; y esto, a pesar
de que las preguntas eran falsas, porque provenían
de los libros de caballería.
Da ihn dieses neue Abenteuer aus seiner Buße erlöst hatte, wollte er wissen, was die unvergleichliche
Dulcinea de Toboso gesagt hatte, als sie die Nachrichten ihres fahrenden Ritters erhielt. Da Sancho
Panza ja nur bis zur Kneipe gekommen war, musste er sich Lügen ausdenken, aber diese Lügen enthielten, obwohl die Fragen falsch waren, weil sie aus
den Ritterbüchern stammten, mehr Wahrheit, als die
Wahrheit selbst.
En los libros de caballería, las doncellas que reinaban en el corazón de los caballeros andantes siempre
hacían cosas poco prácticas, como ensartar perlas
para hacerse un collar, bordar tejidos con hilos de
oro, escribir sonetos y cosas por el estilo. Pero cuando Don Quijote preguntó a Sancho lo que su dueña
hacía en el momento en que llegó a su encuentro,
éste le respondió que Dulcinea estaba cribando trigo.
De inmediato, este trigo se convirtió, en la mente de
Don Quijote, en un montón de perlas cultivadas, de
entre las cuales su reina seleccionaba las más hermosas.
In den Ritterbüchern taten die Jungfrauen, die im
Herzen der Ritter herrschten, immer wenig praktische
Dinge, wie zum Beispiel Perlen einfädeln, um sich
eine Kette zu machen, aus Goldfäden einen Stoff zu
weben, Sonette schreiben und Dinge dieser Art. Als
aber Don Quijote Sancho Panza fragte, was seine
Herrin tat, als er auf sie traf, antwortete dieser ihm,
dass sie im Begriff war, Weizen zu sieben. Für Don
Quijote verwandelte sich dieser Weizen sofort in einen Berg gezüchteter Perlen, aus denen sich seine
Königin die Schönsten aussuchte.
Pero lo que más interesó a Don Quijote fue saber
qué había hecho ella con la carta que él le había escrito con tanto cuidado, poniendo en ella tanto esmero
como Cardenio en las que había escrito a Lucinda;
o sea, todo el arte que poseía un caballero andante.
¿Y cuál fue la respuesta de Sancho Panza?, una trola monumental, que encerraba una gran verdad. Le
dijo que la había rasgado y echado después al fuego
porque como no sabía leer, no quería que alguien le
leyera un texto tan pedante y aburrido; y añadió algo
menos verdadero pero más práctico - pues si la historia con la penitencia no acababa, él nunca seríagobernador - que ella le había dicho que quería que
dejara de una vez esta tontería de la penitencia y volviera a casa.
Doch was Don Quijote am meisten interessierte
war, was sie mit dem Brief gemacht hatte, den er ihr
mit soviel Sorgfalt geschrieben hatte, in den er soviel
Sorgfalt gelegt hatte, wie Cardenio in die Briefe, die er
Luscinda schrieb, also die ganze Kunst, über die ein
fahrender Ritter verfügte. Und was war die Antwort
von Sancho Panza? Eine gewaltige Lüge, die eine
große Wahrheit beinhaltete. Er sagte ihm, dass sie ihn
zerrissen und dann ins Feuer geworfen habe, denn
sie konnte nicht lesen und wollte nicht, dass irgendjemand einen so pedantischen und langweiligen Text
vorlesen würde. Dann fügte er noch etwas hinzu, was zwar weniger wahr, dafür aber praktischer war, denn wenn
das mit der Buße nicht aufhören würde, dann würde er nie
Gouverneur werden. Dass sie wünschte, dass er diesen
Unsinn mit der Buße nun endlich lasse und nach Hause
zurückkehren solle.
A tal afirmación, Don Quijote no le puso ni un pero
porque le confirmaba lo que para su mente enferma
era bastante obvio, que la sin par Dulcinea del Toboso quería tener a tan valiente caballero andante a su
lado cuanto antes.
An der Richtigkeit dieser Aussage hatte Don Quijote keinen Zweifel, denn es bestätigte ihm, was für seinen kranken Geist offensichtlich war. Dulcinea del Toboso wollte
einen solch tapferen Ritter schnellstmöglich an ihrer Seite
haben.
Repasando mentalmente de nuevo todos los libros
de caballería leídos, se le ocurrió también a Don Quijote preguntar a Sancho si Dulcinea le había dado algún obsequio para él, un anillo de oro incrustado de
rubíes, por ejemplo, en señal de aprecio.
A lo que le respondió Sancho, que únicamente le
había dado un pedazo de pan con queso para saciar el hambre, de lo cual Don Quijote dedujo, que su
estima por él era tanta, que las joyas normales, ésas
que se dan a los caballeros andantes normales, no le
parecieron dignas para él, puesto que los superaba
a todos en valor y gloria y prefirió, por lo tanto, no
mandarle nada.
Im Geiste seine Ritterbücher von neuem durchgehend, kam es Don Quijote in den Sinn, Sancho Panza
zu fragen, ob Dulcinea ihm ein Geschenk für ihn gegeben habe, einen Goldring, mit einem Rubin verziert,
zum Beispiel, ein Zeichen ihrer Wertschätzung.
Darauf antwortete Sancho, dass sie ihm nur ein
Stück Brot und ein Stück Käse gegeben habe, um den
Hunger zu stillen, woraus Don Quijote schloss, dass
ihre Wertschätzung für ihn so groß war, dass ein normales Schmuckstück, also eines das Damen gewöhnlichen Rittern geben, ihr nicht würdig erschien, da er
ja alle an Mut und Ruhm überragte und sie es folglich
vorzog, ihm gar nichts zu schicken.
Sancho Panza se reía mucho de todo esto, tanto de
sus mentiras verdaderas como de las preguntas erróneas; pero a nosotros nos parece muy normal, por ser
muy sano transformar un poco la realidad a nuestro gusto.
Sancho Panza lachte herzlich über all dies, sowohl über
seine wahren Lügen wie auch über die falschen Fragen.
Doch uns erscheint das sehr normal, weil es gesund ist,
die Realität ein bisschen nach unserem Geschmack umzuformen.
Pero lo que nos sorprende de verdad es el hecho de
que una persona tan tonta como tú, mi muy estimado
lector, suelte una frase como ésta. Al decirle su amo que
era muy normal que una dama tuviese varios caballeros
andantes en cuyos corazones reinaba, aunque ninguno
de ellos recibiera cosa alguna de ella, le respondió:
Was uns jedoch am meisten überrascht ist die Tatsache,
dass jemand der ähnlich dämlich ist wie du, mein verehrter Leser, einen Satz wie diesen sagt. Als sein Herr ihm
erklärte, dass es ganz normal sei, dass eine Dame mehrere Ritter habe, in deren Herzen sie regiere, auch wenn
keiner von diesen etwas von ihr erhielte, antwortete Sancho Panza.
Sancho Panza:
- Con esa manera de amor he oído yo predicar que
se ha de amar a Nuestro Señor, por sí solo, sin que nos
mueva esperanza de gloria o temor de pena. Aunque yo
le querría amar y servir por lo que pudiese.
Sancho Panza:
„Von dieser Art Liebe habe ich gepredigen hören , man
müsse unseren Herrn nur um seinetwillen lieben, ohne
Hoffnung auf Ruhm oder Angst vor Strafe. Wenn ich ihn
auch lieben und ihm dienen wollte, so wie ich konnte.“
Sí, sí, sí. A pesar de que este Sancho es tan estúpido
como tú, de vez en cuando suelta una frase muy lúcida. No hay que amar a Dios esperando recompensa alguna, ni por temor, hay que amarlo así no más, amarlo a
pesar de que esté tan lejos como la sin par Dulcinea del
Toboso.
Ja, ja, ja. Obwohl dieser Sancho so dämlich ist wie du,
sagt er manchmal ziemlich schlaue Dinge. Man soll Gott weder in Erwartung einer Gegenleistung lieben, noch aus
Angst, man soll ihn einfach so lieben, auch wenn er so weit
weg ist, wie die unvergleichliche Dulcinea del Toboso.
Mientras así platicaba el escudero con su amo, el primero divirtiéndose con sus mentiras y el otro transformando las mentiras en loca, pero bonita realidad, fueron
llamados por el barbero, que se había convertido en escudero de la reina de Micomicón, para hacerles saber
que los otros que allí estaban, querían detenerse un rato
para beber agua en una fuente que quedaba cerca y
comer, lo que pareció muy buena idea a Don Quijote,
porque a lo largo de todo el tiempo que había durado su
penitencia, no había comido nada.
Während sein Herr nun so mit seinem Knappen sprach,
wobei der eine viel Spaß mit seinen Lügen hatte und der
andere sich damit vergnügte, die Lügen in eine verrückte,
aber schöne Wahrheit zu verwandeln, rief sie der Barbier,
der sich als Knappe der Königin von Micomicón verkleidet
hatte, um ihnen mitzuteilen, dass die anderen kurz anzuhalten wünschten, um Wasser aus einer sich in der Nähe
befindlichen Quelle zu trinken und etwas zu essen. Dies
erschien Don Quijote eine gute Idee, denn während der
Zeit seiner Buße, hatte er nichts gegessen.
Entretanto estaban sentados bajo la sombra de un árbol pasó Andrés, aquel mozo que Don Quijote había liberado de las garras y el azote de su amo que no quería
pagarle lo que le debía; y de esta manera, todos supieron el fin de esta hazaña.
Während sie nun im Schatten eines Baumes saßen, kam
Andrés vorbei, jener Junge, den Don Quijote aus den Krallen und der Peitsche seines Herrn, der ihm nicht geben
wollte, was er ihm schuldete, befreit hatte. So erfuhren
denn nun alle das Ende dieser Geschichte.
Viendo Andrés a Don Quijote, se acercó a él. Pero cuál
no fue el asombro de Don Quijote al saber que estaba
enojado en lugar de agradecido, pues con una voz que
temblaba de rabia le dijo:
- Mire señor caballero alucinante, si me ve otra vez
atado a un árbol, no acuda en mi socorro y déjeme en
paz, que mejor sabré valerme por mí mismo… Si no os
hubieseis inmiscuido en el asunto, mi amo me habría
dado un par de azotes más hasta que se le hubiera pasado la ira, me habría pagado lo que me debía y la historia se habría acabado. Mas como por vos y vuestras
locuras se enfadó tanto, me azotó hasta que quedé más
muerto que vivo; porque, inmediatamente después de
que vos hubisteis partido, me amarró nuevamente a la
encina y me fustigó con toda la fuerza que tenía y tiene.
Y de pagarme, ni hablar. Me dijo que me fuese a pedir mi
sueldo adonde el caballero tan valiente, que él, aparte
de mil latigazos, nada me debía.
Als Andrés Don Quijote sah, näherte er sich ihm. Doch
wie überrascht war Don Quijote, als er erkennen musste,
dass dieser empört und keineswegs dankbar war, denn
mit einer Stimme, die vor Wut zitterte, sagte er: „Schau
mein halluzinierender Ritter, wenn Ihr mich noch mal angebunden an einen Baum vorfindet, dann kommt mir nicht
zur Hilfe und lasst mich in Ruhe, denn ich weiß mir besser
selbst zu helfen. Wenn Ihr Euch nicht in die Angelegenheit eingemischt hättet, dann hätte mein Herr mir noch ein
paar Peitschenhiebe gegeben, bis seine Wut verraucht
gewesen wäre. Anschließend hätte er mir das Geld gegeben, das er mir schuldete. Doch Euretwegen und wegen
Euren Verrücktheiten ist er so zornig geworden, dass er
mich peitschte, bis ich mehr tot als lebendig war. Denn
unmittelbar nachdem Ihr weg wart, band er mich wieder
an und peitschte mich mit aller Kraft, über die er verfügte.
Von Zahlen war nicht mehr die Rede. Er sagte mir, dass
ich mir meinen Lohn bei dem so mutigen Ritter holen solle
und dass das Einzige, das er mir schulde, tausend Peitschenhiebe wären.“
Sí, sí, sí. Muy divertido el episodio y, claro está, todos
tuvieron que contenerse para no estallar en carcajadas
al ver como Don Quijote se puso rojo como un tomate
de vergüenza. Y él que más se divertía era el cura, que
tan bien vivía de las riquezas que la Iglesia recibía en
contrapartida por la fe cristiana.
Ja, ja, ja. Sehr witzig die Episode, und es ist vollkommen
klar, dass sich alle beherrschen mussten, um nicht loszulachen, als sie sahen, dass Don Quijote vor Scham rot wie
eine Tomate wurde. Der, der sich am meisten amüsierte war
der Pfarrer, der so gut von dem Reichtum lebte, den die Kirche als Gegenleistung für den christlichen Glauben erhielt